Sismo

Los sismos son fenómenos naturales, donde la corteza terrestre suele sacudirse de forma brusca y pasajera, liberando energía acumulada en forma de ondas. Dependiendo de su intensidad y origen, los sismos pueden provocar el desplazamiento de tierras, tsunamis (maremotos) o el aumento de la actividad volcánica. Como los sismos son impredecibles y potencialmente peligrosos, es necesario estar preparados para enfrentarlos. Una respuesta temprana resulta crucial para proteger la vida en un caso de emergencia como este, especialmente, considerando que los sismos de mayor intensidad tienden a estar acompañados de réplicas que pueden afectar seriamente los lugares donde habitan o trabajan las personas.

Consejos de Seguridad

  • Si nos encontramos dentro de un inmueble

Lo ideal es buscar un lugar seguro, alejado de ventanas o sectores con presencia de vidrios y objetos que puedan caernos encima, como lámparas, estantes o muebles. Los especialistas recomiendan refugiarse en sectores donde la construcción es más firme o debajo de una mesa, para evitar que algún elemento contundente pueda provocar daño físico. También es clave permanecer en la zona segura hasta que pase el sismo y no utilizar ascensores, sino que evacuar por escaleras y zonas seguras.

  • Si nos encontramos al aire libre

Estando en un espacio abierto y si no existe ningún riesgo cercano como edificios, postes de alumbrado público, cables eléctricos de alta tensión o estructuras; lo mejor es permanecer en el lugar y esperar a que el movimiento sísmico cese. Pero siempre es necesario tener en cuenta que un réplica puede ocurrir, con una intensidad igual o mayor que el sismo inicial.

  • Si nos encontramos en un vehículo en movimiento

Es recomendable no detenerse frente a edificios, casas o construcciones que puedan sufrir algún daño severo y que ponga en riesgo nuestra integridad. Los especialistas aconsejan evitar carreteras en altura o puentes que puedan verse afectados en su estructura base, con el riesgo inminente de desplomarse.

  • Si nos encontramos atrapados entre los escombros

No se deben encender fósforos ni otros productos inflamables, con el fin de iluminar en búsqueda de una salida, ya que esto podría provocar focos de incendio involuntarios. Tampoco hay que moverse bruscamente, puesto que podríamos generar el movimiento de escombros que podrían dañarnos. Lo mejor en este tipo de casos, es realizar algún tipo de ruido con algún elemento contundente en algún tubo, estructura de fierro o pared, para que los socorristas puedan encontrarnos. Gritar o respirar agitadamente no es recomendable debido al polvo en suspensión que podríamos inhalar, afectando la salud.